El ambicioso Open Internacional Pesca de Altura Gran Canaria, apoyado por Turismo de Gran Canaria, será un nuevo certamen que organiza el Club de Yates Pasito Blanco y que hereda la tradición y la filosofía del Concurso de Pesca Pasito Blanco, que cuenta con más de tres décadas de historia.
Al margen de la controversia de si se debe o no vender un pez que está en grave riesgo de desaparecer en los ríos españoles, lo cierto es que el Campanu ha sobrevivido incluso a la prohibición de comercializar con esta especie,norma que entró en vigor en el año 2002 después de que las autoridades decidiesen poner freno a un mercadeo insostenible. Desde ese año, el único salmón que se puede vender es el campanu de cada río, y siempre en acto público.
Un poco de historia del salmón en Asturias
Los derechos de pesca del salmón siempre fueron objeto de deseo y de lucha de unos cuantos escogidos. Ya en el año 775 aparecía ligada a los derechos de la monarquía asturiana, que posteriormente se convertirían en los llamados ‘privilegios de pesca’que durante siglos pasaron a pertenecer al clero, la nobleza o incluso a determinados monasterios según el río donde se ubicaban. Fue a comienzos del siglo XIX cuando se suprimen estos privilegios y el Estado pasa a gestionar el bien de su pesca.
El carácter deportivo de su la captura del salmón no llega hasta los primeros años del siglo XX con la II República, que autorizó las primeras sociedades de caza y pesca y establece los cotos reglamentados, en los que además se prohíbe ya cualquier tipo de arte que no sea la caña y que, finalmente, se regulará con laLey de Pesca Fluvial de 1942, aún vigente. Un año más tarde comienzan a precintarse los salmones, un método esencial para conocer el número de peces que remontan los ríos, su tamaño y longitud.
¿Por qué se llamaCampanu al primer salmón que se pesca en Asturias?
Hay que remontarse varios siglos atrás, sin fecha concreta, para saber cuándo se acuñó el término ‘Campanu’. En tiempos de hambre y muy probablemente durante la Edad Media, el repicar de las campanas de cada iglesia anunciaba el avistamiento de los primeros salmones que remontaban cada año, avisando así a la población para que tuviese la oportunidad de hacer acopio de una importante fuente de alimento. De esas campanas deriva la palabra «campanu», que pronto se asoció a un concepto de esperanza y de alegría, un acto de agradecimiento a la naturaleza por mantener el ciclo de la vida.
Éste no es acontecimiento exclusivo de España, sino que se celebra en todos los rincones del mundo donde hay salmones. En Noruega lo denominan premiärlaxen (primer salmón), y en Estados Unidos thesupernatural one (el primer superviviente) como un modo de nombrar una tradición nativa que considera a los salmones reencarnaciones humanas en el océano y que remontan los ríos para alimentar a los suyos. En otras zonas como Irlanda o Escocia es frecuente ver referencias al salmón y las campanas en pubs, tiendas o los monumentos locales.
La subasta del Campanu
Puente Romano de Cangas de Onis. / Foto: David Álvarez López.
Durante muchos años, el primer salmón del año se subastaba en establecimientos ribereños como Casa Grana o el casino de Cornellana, donde acudía un gran número de curiosos y pujadores para hacerse con el campanu. A raíz de la prohibición de su venta, se decidió que este acto tuviese un carácter festivo y quedó enmarcado en las actividades de la Feria del Salmón que se celebra en el monasterio de San Salvador Cornellana, donde la subasta está perfectamente reglamentada y los ofertantes tienen que acreditarse previamente para hacer valer su condición durante el acto. En las últimas temporadas los campanus asturianos han sido pescados y comprados de esta manera:
Campanu año 2005: Juan Manuel Mori. Salmón de 4,8 kg pescado en el coto La Pena (río Eo). Comprado por el restaurante Casa Parrondo (Madrid) por 13.200 euros.
Campanu año 2006. Paulino Fervienza. Salmón de 3,7 kg pescado en el coto A Volta (río Eo). Comprado por el restaurante Casa Tista (Ribadesella, Asturias) por 12.000 euros.
Campanu año 2007. Luis Miguel García. Salmón de 4,4 kg pescado en el coto la Bouza (río Narcea). Comprado por el restaurante As de Picas, del Casino de Gijón, por 18.000 euros.
Campanu año 2008. Isaías Rebordinos. Salmón de 4,9 kg pescado en la zona libre del Puente Quinzanas (río Narcea). Comprado por el restaurante La Chalana (Aviles, Asturias) por 14.500 euros.
Campanu año 2009. Gonzalo Álvarez. Salmón de 10 kg pescado en el coto de Puente Quinzanas (río Narcea). Comprado por el restaurante Bocamar (Oviedo, Asturias) por 8.500 euros.
Campanu año 2010. Bernardo Velázquez. Salmón de 6,2 kg pescado en el pozo Fabeiro, del río Narcea. Comprado por el restaurante Casa Parrondo por 10.000 euros
Campanu año 2011. Declarado nulo al demostrarse que el pescador pescó el salmón en el río Esva y no en el Narcea como había asegurado.
Campanu año 2012. Enrique García. Salmón de 6,7 kg pescado en el pozo Los Kiwis del río Narcea. Comprado por la carnicería Delfina de Avilés por 6.000 euros.
Campanu año 2013. Pescado por Federico Vega Díaz. Salmón de 8,850 kg capturado en la zona de La Masona, río Sella. Adquirido por el restaurante El Campanu por 6.700 euros.
Campanu año 2014. Pescado por Íñigo Justo Fernández con un peso de 4,5 kg en el coto de El Tilo del río Cares. Fue comprado por José María Mori Cuesta, El Marqués por 5.500 euros.
Campanu año 2015. Pescado por el bilbaíno Jorge Moreno en el coto de Llaos, río Sella con un peso de 5,8 kg. Fue adquirido por José María Mori Cuesta, El Marqués por 5.500 euros.
Campanu año 2016. El campanu más barato de los últimos años (3.700 euros) fue pescado en la zona conocida como La Vola, del río Eo, por Guillermo Maraño. El pez pesó 4,1 kg.
Campanu año 2017. Pescado por un veterano de Trelles (Coaña) de 63 años de edad, en el Louredal, en el río Eo a las ocho menos diez de la mañana. El restaurante gijonés As de Picas se llevó el ejemplar por 9.500 euros.
Campanu año 2018. El campanu 2018, de siete kilos, se vendió por casi 12.000 euros en el río Sella en Cangas de Onís, y pesó 7,1 kilos. Lo pescó Juan Antonio González.
Campanu año 2019. Le salió al ovetense Fernando López Castro en en el pozo la Pría del coto El Tilo del río Cares a los pocos minutos de abrirse la temporada y se subastó por 10.000 euros.
Campanu año 2020. Pesó 5,3 kilogramos y midió 76 centímetros. Fue pescado en el coto parcial de los Espigones de Triongu. Lo subastaron al Bosque de Javita por 10.000 euros en total.
Campanu año 2021. Gonzalo Suárez lo echó a tierra en el coto de La Volta y pesó algo más de cinco kilos. Lo subastó al Bosque de Javita por 10.300 euros en total.
El siluro es un depredador catalogado como especie exótica invasora que se reproduce fácilmente en nuestras aguas y, aunque su presencia estaba asentada en cuencas como el Ebro, era más rara en otras como las del Duero, del Guadiana o del Guadalquivir. Ahora, tras haber sido capturado un ejemplar de 100 kilos de peso y más de 2 metros de longitud en la presa de Alcalá del Río, en la provincia de Sevilla, la especie amenaza las cercanas aguas del Parque Natural de Doñana.
Esta misma semana, diarios provinciales como Diario de Huelva informaban de que ya se habían avistado ejemplares de este depredador en las cercanías delos embalses de Aracena y Zufre, algo confirmado por el Grupo de trabajo en materia de Agua del Consejo de Participación del Espacio Natural Doñana en una reunión que tuvo lugar la semana pasada.
Tras ello, representantes de las entidades integrantes del grupo de trabajo, incluida la estación Biológica de Doñana, decidieron elevar al Pleno del Consejo de Doñana la petición de que la Administración ambiental desarrolle de forma inmediata medidas de erradicación y control de la especie.
Su posible presencia en las marismas de Doñana amenaza, por tanto, las muy escasas poblaciones que quedan de cercetas pardillas, malvasías, porrones pardos o fochas cornudas, todas ellas aves en peligro de extinción.
El siluro, un depredador nato
En el caso del siluro europeo (Silurus glanis), «hablamos de un depredador nato», un pez colosal que, para desarrollar sus «2,5 metros de largo y hasta 130 kilos de peso», requiere «una ingesta tremenda de biomasa cada día», explicaba hace unos días el catedrático de Zoología de la Universidad de Córdoba, Carlos Fernández Delgado, en una publicación de la que este medio se hizo eco hace unas semanas.
La detección del siluro «en una zona con la importancia biológica del bajo Guadalquivir», supone «estar a las puertas de una tragedia ambiental», ya que la desembocadura este río «constituye la zona de cría y engorde de muchas especies», sobre todo de «especies comerciales». Según Fernández, la desembocadura «del Guadalquivir produce el 90 % de los boquerones, sardinas, lubinas, corvinas y lenguados -entre otras especies- que después se pescan en el Golfo de Cádiz».
Podría desplazarse por todo el Guadalquivir
A pesar de que el siluro es un pez de agua dulce, puede llegar a soportar un nivel de salinidad equivalente «a la mitad de la sal presente en el agua marina, unos 15 gramos por litro», lo que le acerca «peligrosamente» a las zonas de cría de la desembocadura.
En el bajo Guadalquivir tiene lugar un fenómeno natural conocido como ‘tapón salino’, «una barrera que se desplaza a lo largo de su cauce», que hace que «por encima de él», el agua sea «más dulce» y por debajo «más salobre», explica el experto.
«Cuando llueve mucho, el agua dulce de la cuenca empuja ese tapón salino hacia abajo» y, en ocasiones, «puede llegar a situarse prácticamente en la desembocadura del Guadalquivir». Este fenómeno «vuelve dulce todo el cauce del río», por lo que el siluro «tendría libertad para desplazarse por todo el Guadalquivir y asaltar Doñana».
El pescador César Priego se encontraba durante una jornada de pesca en la provincia de Burgos cuando, con cucharilla en el embalse de Arlanzón, consiguió sacar del agua una enorme trucha. Una vez la tuvo en la mano, el pescador advirtió que la zona del estómago la tenía «bastante hinchada», pero no imaginaba lo que podría llevar en su interior.
Aquel día entregó a su amigo Alberto García el ejemplar para que lo cocinase pero, cuando éste fue a abrirlo, se encontró con la sorpresa de que la trucha tenía ¡cuatro ratones en su interior!
Las truchas son depredadoras y, por tanto, pueden comer ratones
La trucha con los ratones que tenía en su interior.
Todo pescador conoce que la trucha es un salmónido y, por lo tanto, depreda a otras presas para alimentarse, por lo que es posible que coma animales como ratas de agua o ratones para sobrevivir. Pero lo más sorprendente es que tuviese hasta cuatro ejemplares en su interior, algo que ha impactado a los pescadores que han visto el hallazgo a través de las redes sociales.
Miguel Delibes ya relató cómo pescó una trucha con una rata en su interior
El genial escritor Miguel Delibes, del que en 2020 se han cumplido 100 años de su nacimiento, ya relató en su libro Mis amigas las truchas cómo pescó una de ellas con una rata en su interior. En concreto, lo narraba de esta forma:
La trucha caza, ordinariamente, para comer —mosquitos, lombrices, larvas, cangrejos y hasta una rata que encontré una vez en el estómago de un ejemplar de kilo y medio— pero también, a veces, para desembarazarse de seres fastidiosos. Generalmente, la trucha entra a la cucharilla porque cree ver en ella una mariposa o un pececillo que la apetece. Esto suele ser lo normal. Lo excepcional es lo otro, la caza por irritación que no por apetito; el mordisco rabioso, iracundo, del pez a quien le hemos pasado cuarenta veces por los morros una cucharilla muy revolucionada.
¿Cómo se pescan las truchas con ratón?
El ratón, aunque no es un señuelo demasiado extendido para la pesca de la trucha, sí que resulta eficaz en algunas zonas de nuestro país. Hace dos temporadas, el canal de YouTube Viajes Pesca Mosca publicó un vídeo en el que especificaba cómo pescar estos salmónidos con imitaciones de ratón y culebras… y el resultado es espectacular.
La serviola es uno de los grandes tesoros que buscan cientos de pescadores de nuestro país. Se trata de un pez cuyos machos pueden llegar alcanzar los 150 centímetros de longitud y 40 kilos de peso, como el pez protagonista de la historia que narramos a continuación.
El pescador mallorquín Carlos Ferrer logró pescar al gran ejemplar de serviola en aguas de esta comunidad autónoma junto a su hijo Adrián Ferrer, de 15 años de edad. Concretamente en las cercanías de la localidad de Alcudia.
Iban a pescar dentones cuando les sorprendió esta serviola
Aquel día, padre e hijo salieron con la barca de un compañero al mar y comenzaron a pescar al curri con calamar vivo. Armados con su caña Kalisub de 20 libras, su carrete Accurate Boss y su línea Fluorine de 0’70 milímetros, se dispusieron a la pesca de dentones… cuando se toparon con la sorpresa que les ofreció esta serviola.
«Casi tira al mar a mi hijo»
La lucha, de unos cuarenta minutos, estuvo protagonizada por el hijo de Carlos, que auxiliado por su progenitor fue sacando poco a poco al pez del agua. «Cuando picó, cogió la caña mi hijo y casi lo tira al mar», declara sobre el momento de la picada este experimentado pescador, que hace unos años participó en el Mundial de surfcasting celebrado en Croacia, donde fue medalla de bronce, y en el campeonato de pesca en Embarcación Fondeada de España, donde consiguió un oro.
«Una serviola de este peso ya es increíble en esta zona. Alguna sí se coge, pero no es lo habitual, ya que las más grandes que conocemos son de 25 o 30 kilos a lo sumo», explica Ferrer. Además, detalla un reciente problema sufrido en la zona, en la que «se han cogido algunas serviolas como enfermas, feas, con la piel sin brillo…».
Por último, da las gracias a su compañero Juan porque «sin él, no hubiese sido posible capturar este ejemplar».
Pescan un atún tan grande que son incapaces de subirlo al barco
Momento en que uno de los pescadores intenta subir el atún al barco. / Facebook
Imagínate la escena. Llevas toda la mañana junto a tus amigos pescando, o intentándolo, desde una embarcación en mar abierto. No pica nada y os desesperáis. Sin embargo, de repente algo cae en una de las cañas y empieza a tirar.
Se trata de una bestia, nadie puede hacerse con ella, minuto tras minuto transcurre una feroz pelea entre el hombre y el pez, ninguno de los dos cesa en su empeño. El pez trata de escapar y el hombre trata de llevar la captura a su terreno, hasta que, al fin, este último gana la contienda y logra acercar al animal al barco. Aquí te lo mostramos.
A mediados del mes de marzo, el pescador pacense Antonio Tejeda logró capturar un enorme ejemplar de carpa royal en el río Guadiana a su paso por la localidad de Valdivia (Badajoz). Era el fin de diez largos días de búsqueda de este animal al que había cebado durante días con el fin de dar con él.
Aprovechaba el tiempo libre que su trabajo le dejaba
«Es una zona en la que sabía que había grandes carpas, pero sin duda mi objetivo era sacar una de 15 kilos a lo sumo, no la que conseguí», explica el pescador a este medio. Antes de ir a trabajar, en el momento de comer y tras terminar las jornadas laborales, Antonio se acercaba a este lugar del Guadiana para cebar y preparar su jornada piscícola, hasta que por fin decidió ponerse.
«A la semana aproximadamente de ir cebando la zona, conseguí ponerme. No fue fácil, porque fueron muchas horas de espera, muchos días seguidos yendo a la zona cebada… hasta que sentí el tirón». A última hora de una jornada de mediados de marzo, y apurando el día para evitar llegar a casa en una hora posterior al toque de queda, Antonio comenzó a sacar la carpa.
Creía que la carpa se había enganchado con una rama al ir a sacarla del agua
«No fue una lucha demasiado larga, pues duró un cuarto de hora aproximadamente, pero sí que fue intensa. No debía tener fallos o, de lo contrario, de un mal tirón, perdería al ejemplar que tanto tiempo y esfuerzo me había costado que entrara a la caña», en la cual tenía un cebo compuesto por dos chufas de Octopus y un grano de maíz también de Octopus.
Enseguida que sacó el animal, llamó a su compañero para que se acercase desde el pueblo a hacerle las preceptivas fotografías antes de soltarlo: «No pensaba que la carpa que tenía delante pesase eso. Al principio, como el agua estaba turbia, atisbé que tendría 14 o 15 kilos… pero fue increíble ver que finalmente pesó casi 23 kilos. De hecho, al ir a cogerla, como estaba muy gorda y no aparentaba lo que pesaba, creía que se había enganchado con una rama…», describe Tejeda.
Pesca una carpa royal de 34 kilos que podría ser récord del Ebro: «Creí que era un siluro»
El pescador catalán Jonathan Losa Julián, natural de la localidad de Ribarroja de Ebro (Tarragona) ni se imaginaba que el pasado 7 de marzo, cuando se disponía a pasar un agradable día de pesca junto a sus amigos Cruz Martínez Márquez y Marc Esteve, iba a vivir una de las jornadas más importantes de su vida. Así nos lo contó.
El joven pescador zaragozano Borja Valenzuela, de 24 años de edad y natural de la localidad de Remolinos, en la provincia de Zaragoza, logró capturar, el pasado día 11 de abril, una enorme carpa común en aguas del embalse de Caspe en medio de una tormenta. Además, múltiples golpes de suerte se fundieron aquella jornada para que el joven diese con el ejemplar.
La alarma sonó sin haber cebado previamente y en medio de la lluvia
En primer lugar, Borja explica que el embalse se encuentra a una hora y media en coche de su domicilio, por lo que no había cebado la zona, algo que cualquier amante del carpfishing sabe que es fundamental para conseguir una carpa; en segundo lugar, las arduas condiciones climatológicas, ya que estaba lloviendo fuertemente. «Yo no hubiese dado nada en una apuesta», confiesa el pescador en declaraciones a Jara y Sedal.
La carpa, que dio 21 kilos de peso finalmente, llegó en el momento en el que la tormenta comenzó a calmarse: «En cuanto dejaron de caer gotas gordas, sonó una de las alarmas. El agua se había oxigenado y eso creo que fue clave para que entrase el animal», detalla Valenzuela. La caña en la que le picó, cuyo cebo estaba a unos 100 metros de la orilla, tenía pellet en el anzuelo con un flotante de piña y banana.
Tras ello, el joven se armó de paciencia para que un mal tirón no diese al traste con la picada: «Al principio, la carpa no tiró demasiado, por lo que creía que no tenía el volumen que finalmente vi», describe el joven. En los últimos minutos de la lucha, la batalla se complicó: «Conforme se acercaba a la orilla, la pugna iba a más, hasta que finalmente logré cansarla quince minutos más tarde de la picada y sacarla».
El júbilo final: 21 kilos de carpa
Entonces, llegó el gozo de cualquier pescador: disfrutar la pieza. Tras unos minutos haciendo una sesión fotográfica con el ciprínido recién capturado, Borja lo liberó de nuevo entre gritos de júbilo.
Pesca una carpa royal de 22 kilos que llevaba diez días intentando capturar
A mediados del mes de marzo, el pescador pacense Antonio Tejeda logró capturar un enorme ejemplar de carpa royal en el río Guadiana a su paso por la localidad de Valdivia (Badajoz). Era el fin de diez largos días de búsqueda de este animal al que había cebado durante días con el fin de dar con él. Así nos lo contó.
Pesca una carpa royal de 34 kilos que podría ser récord del Ebro: «Creí que era un siluro»
El pescador catalán Jonathan Losa Julián, natural de la localidad de Ribarroja de Ebro (Tarragona) ni se imaginaba que el pasado 7 de marzo, cuando se disponía a pasar un agradable día de pesca junto a sus amigos Cruz Martínez Márquez y Marc Esteve, iba a vivir una de las jornadas más importantes de su vida. Así nos lo contó.
La joven pescadora jiennense Cristina Marín Blanco ha experimentado, este fin de semana, la emocionante picada de un bello barbo andaluz que, aunque sus más de 5 kilos no hacían de él un peso descomunal, sí le dio emoción al momento vivido.
La joven, natural de la localidad jiennense de Marmolejo, pescó este ejemplar de ciprínido en el pantano del Encinarejo, situado en el Parque natural de la Sierra de Andújar, en la misma provincia.
El barbo andaluz o ‘gitano’, como otros le conocen, es una pieza ubicada en las cuencas de los ríos Guadiaro, Guadalhorce, Guadalete y Guadalquivir, entre otros afluentes. También está presente en las cuencas hidrográficas al sur del territorio portugués y es una auténtica joya de nuestras aguas.
Llevaba años tras un barbo como este
«Llevaba tiempo detrás de sacar un barbo como ese ya que, aunque lleva gustándome la pesca desde pequeña, tan sólo llevo un año con todo mi equipo en la busca de barbos de este tipo», explica la joven en declaraciones a Jara y Sedal.
Aunque ha podido hacerse con más ejemplares de barbo en ese pantano, ninguno tenía la entidad del que consiguió capturar hace tan sólo unas horas «no solo por el ejemplar, sino porque la picada fue tras una increíble arrancada».
«Me dio una lucha en la que ya presentía el ejemplar que tenía enganchado… y efectivamente, así fue». Un gran barbo estaba en el anzuelo que, aunque no será récord, sí que le ofreció una impactante imagen que siempre tendrá en su recuerdo.
Al sentir el puntal hundirse, la joven acudió presta a coger la caña y, tras el tirón inicial, la pieza comenzó a ofrecer una ardua batalla hasta que Cristina consiguió acercarla a la orilla: «No paraba y, cada metro que avanzaba, mis vellos se ponían más de punta», confiesa Marín a este medio. Así lo devolvió al agua posteriormente:
Consejos para pescar barbos
El barbo, especie que junto a la carpa se han convertido en una de las más deportivas y deseadas en la pesca de nuestro país, es difícil de capturar. Te contamos aquí todos nuestros consejos.
El pescador Carlos Seoane, natural de la localidad de Olías del Rey (Toledo), tuvo el pasado sábado 1 de mayo su día de suerte. En una jornada de pesca de luciopercas en el embalse de Castrejón, ubicado en esta provincia castellano manchega, el pescador logró capturar un enorme lucio de casi 10 kilos de peso. La picada fue peculiar, ya que no tenía ni siquiera puesto un hilo trenzado ni de acero que aguantase los afilados dientes de este depredador. No obstante, contra todo pronóstico, lo consiguió sacar.
Notó que el lucio atacó a otro pez al lado de la orilla y echó ahí el señuelo
Seoane comienza explicando a Jara y Sedal que ya le habían avisado previamente que había «mucha lucioperca» en ese embalse, por lo que «me llevé un par de pickies a ver si salía alguna». Mientras estaba lanzando a una distancia considerable de la orilla, el joven vio que algo atacaba al lado de ésta, por ello echó el pickie al lado de la onda que dejó en el agua el ataque y, al instante, el lucio le pegó «un tirón tremendo».
Al percatarse de que era un pez de considerable tamaño, el joven se asustó por si no podía sacarlo y sus afilados dientes cortaban el sedal, pero poco a poco fue cansando al enorme depredador hasta que logró acercarlo a la orilla. «Llamé a mi compañero cuando vi que era tremendo. Nunca había visto una cosa igual», confiesa.
Otra imagen del joven con el lucio.
Casi se le parte la caña
Ambos pescadores pidieron una báscula a un compañero que había a su lado y ésta marcó casi 10 kilos: «Fue impresionante». Además, Carlos explica que «la caña tampoco era muy apropiada para sacar peces tan grandes, y en varias ocasiones noté cómo crujía y creía que se me partía. No es una caña muy flexible por ser vieja. Creía que se me partía en dos…», concluye su relato Seoane sobre una jornada fluvial que no olvidará nunca.
Pesca a carpfishing un increíble lucio que se comió la carpa que le acababa de picar
El pescador toledano Raúl Gómez, de 31 años, consiguió hacerse este domingo con un espectacular lucio de 10 kilos en el pantano de La Torre de Abraham, situado en la provincia de Ciudad Real. Gómez estaba practicando el carpfishing cuando el depredador intentó comerse a una pequeña carpa que había picado en su caña. Es, por tanto, una de las picadas más peculiares y extrañas que hemos narrado en Jara y Sedal en los últimos años. Así nos lo contó.
El pescador alcarreño Miguel García García, natural de la localidad de Alovera (Guadalajara), logró dar captura el pasado martes, 4 de mayo, a un espectacular lucio en el embalse de Buendía, en la citada provincia castellano manchega. La pieza, según narra García, no parecía un pez cuando le picó, ya que «creía que tenía una rama grande o un tronco enganchado».
Una intensa niebla mañanera para recibirlo en Buendía
García narra que aquel martes amaneció «con una intensa niebla», augurando «que permanecería varias horas». No obstante, el pescador no perdió la esperanza en pasar una agradable jornada como así fue, ya que además de fructífera fue histórica para él, puesto que no olvidará cómo dio pesca a este increíble depredador.
Lo pescó desde su barca hinchable con un crankbite
Miguel preparó una barca hinchable y se puso a pescar con su crankbite a spinning a ver si tenía suerte. Después de sacar un lucio de mediano tamaño, sintió cómo algo enorme tiraba del trenzado y del hilo de acero: «Lo primero que pensé es que el señuelo se me había enganchado en la ova o en un tronco. Lógicamente, lo que hice fue tirar poco a poco hasta lograr sacarlo para evitar perderlo… hasta que me percaté que era un enorme lucio lo que había tras él».
En ese momento, Miguel se armó de paciencia: «No me enteré ni de la picada, pero en dos segundos el carrete ni podía con la pieza. Fue algo increíble», explica sobre el momento en el que recogía al enorme lucio. Tardó en sacar a la pieza unos veinte minutos «que se hicieron eternos» por la fuerza con la que el depredador tiraba.
Tras ello, llegó el momento de las fotografías con la pieza: «Cuando la vi, no me lo creía. Es la captura de mi vida, sin duda».
Pesca un lucio de más de 13 kilos tras un lance épico en Badajoz
El pescador alicantino Ignacio Morales Martín logró dar captura, hace unos meses en un pantano de la provincia de Badajoz, a un espectacular lucio hembra de más de 13 kilos que le rompió su carrete Shimano Perfection y con el que necesitó estar más de media hora reanimándolo. Morales ha narrado a Jara y Sedal todos los detalles de esta apasionante jornada en la que asegura que, si llega a pescar este ejemplar mes y medio más tarde, «pesaría sus dieciséis kilos» debido a las huevas que tendría. Así dio con él.
El pescador extremeño Jesús Redondo Fernández, natural de la localidad de Miajadas (Cáceres) y de 25 años de edad vivió, el pasado fin de semana, uno de los días «más felices» de su vida, como así confiesa en declaraciones a Jara y Sedal. Logró pescar una descomunal carpa royal de más de 30 kilos de peso… ¡con un anzuelo del número 8! Lo hizo en el río Guadiana a su paso por la provincia de Badajoz en un lugar que prefiere que se mantenga en el anonimato.
Redondo ha relatado la intensa jornada vivida y que comenzó con el cebado de la zona en la tarde del viernes, día 7 de mayo: «Llegué aquel día al lugar y mi novia me ayudó a tirar las cañas. Como el río estaba muy alto y había mucha corriente, fui a buscar zonas bajas en las que no hubiese demasiado movimiento de agua, y encontré una ideal para pescar al día siguiente», explica en palabras a este medio.
La mañana comenzó mal: una primera carpa perdida a las 9:00
Ya el sábado, 8 de mayo, sobre las 9:00 horas de la mañana, una primera carpa le picó, pero no consiguió darle pesca: «Se me enganchó la barca y la perdí», dice Jesús. No obstante, su esperanza no decayó y volvió a tirar las cañas en el mismo lugar con su anzuelo del 8 y maíz y chufas como cebo.
«A las 14:00 horas aproximadamente llegó mi novia al lugar, comimos y dormimos la siesta», relata. A las 16:30 horas, se arrancó una de las cañas y el joven se montó rápido en la barca para hacerse con ella: «Me llevó hacia abajo, hacia arriba, y una vez que se me enrolló en una rama, pude verla. Era todo un monstruo. Ni me imaginaba que en mi vida pudiese hacerme con una carpa así. Era increíble», describe el pescador.
Tras «lucharla mucho», ya que incluso la metió de forma fallida dos veces en la sacadera, la subió hacia arriba: «En ese momento no sabía si hablar o si llorar. Me quedé callado y, a los segundos, me eché a llorar de la emoción», asegura. Tardó unos 35 minutos en sacarla del agua.
El joven explica que puso un anzuelo del número 8 «porque a mí me gusta pescar con la chufa y el maíz un poco levantado, por eso puse un anzuelo muy pequeño, además de para evitar enganches».
Pesca una carpa royal récord de 28 kilos en Orellana: «Era más vieja que yo»
«Cuando la vi en la orilla, rompí a llorar». Es la confesión que el pescador pacense Raúl Sánchez Mendoza acaba de hacer a Jara y Sedal después de haber logrado, en días pasados, capturar una carpa que, sin duda, ya es una de las más imponentes logradas sobre esta especie en el embalse de Orellana (Badajoz). Así nos lo contó.
El pescador madrileño Javier Llorente, de 28 años de edad, se topó este domingo 23 de mayo en un río de la Comunidad de Madrid con una increíble sorpresa: la de una carpa amur picando a su caña.
La carpa amur o herbívora (Ctenopharyngodon idella), es una especie de ciprínido originario de China y este de Siberia, pero que está presente también en ríos de Francia. En España tan sólo se tenía constancia de su presencia en Cataluña, pero no se había localizado en otros lugares. Por tal motivo, la captura de este ejemplar en terrenos de la capital española ha suscitado la curiosidad de miles de pescadores, que han quedado impactados cuando han visto la fotografía en las redes sociales.
Una ‘revolución’ en redes sociales
«Desde que pasé las imágenes de la carpa por algunos grupos de WhatsApp, no he dejado de recibir mensajes de enhorabuena, de curiosidad por saber el lugar donde la he capturado -algo que el pescador prefiere no desvelar- y por saber cómo lo había conseguido», relata a Jara y Sedal.
«Este tipo de carpa es herbívora 100%, tan sólo plantas o algas, por eso es tan difícil que pique en una caña», explica Llorente a este medio. «Tardé en poder cogerla con mis manos 35 minutos, ya que picó a una caña pequeña que tenía puesta entre los matorrales. No podemos meter cañas grandes y el hilo que llevaba era para nueve kilos y medio de peso», por lo que sacarla era otro reto.
La teoría de por qué esta carpa picó al pan
Como ha especificado el pescador, este tipo de carpa es exclusivamente herbívora, por lo que resulta curioso que picase al pan que tenía colocado en su anzuelo Javier Llorente. El pescador tiene su teoría: «Dado que había bastante corriente, y en varias ocasiones anteriores comprobé que los anzuelos salían del agua llenos de ova enganchada, creo que fue esa la razón por la que la carpa picó al anzuelo: al intentar alimentarse de esa alga, justo picó al pan que era el cebo», dice el pescador madrileño.
Tras la incansable lucha del peculiar ciprínido, Javier pudo disfrutar de una sesión de fotos con este espectacular animal antes de devolverlo de nuevo al agua.
Pesca una monstruosa carpa que podría ser récord de España: «Tiene casi 40 kilos»
La imagen que ilustra esta otra noticia corresponde a un vídeo que se ha vuelto viral entre los pescadores de carpfishing durante las últimas horas. Se trata de una monstruosa carpa que podría haber sido pescada en un embalse cacereño y podría pesar unos 38 kilos, aunque estos datos aún no han podido ser confirmados por esta redacción. Así nos lo contó.
En el mercado se encuentran tres tipos de líneas básicamente, cada una con características determinadas y que por lo tanto pueden ser más o menos válidas dependiendo del tipo de uso que le vayamos a dar y de la técnica o tipo de señuelos que vamos trabajar.
Conocer las características diferenciadoras de cada una de ellas, nos puede servir a la hora de saber cuál puede ser la opción que mejor se adapta a nuestras necesidades.
Monofilamento
Flurorocarbono
Trenzado
Flotabilidad
Alta
Regular
Alta
Elasticidad
Alta
Escasa
Nula
Invisibilidad bajo el agua
Regular
Muy alta
Muy Baja
Rigidez
Regular
Alta
Baja
Resistencia al nudo
Alta
Regular-alta
Alta
Resistencia a la abrasión
Alta
Muy alta
Regular
Resistencia a la tracción
Regular
Regular-alta
Muy alta
Durabilidad
Regular
Alta
Alta
Precio
Bajo
Alto
Alto
¿Qué línea de pesca elijo?
De esta tabla podemos sacar conclusiones muy interesantes que aplicadas a la práctica nos pueden ayudar en gran medida a saber qué línea utilizar. Entre otras muchas podríamos destacar: – Las líneas trenzadas seguidas de las de fluorocarbono y monofilamento son las que mayor sensibilidad transmiten. – El fluorocarbono no es una alternativa válida para pescar en superficie. En cambio para pescar a cierta profundidad nos aportará más sensibilidad y discreción en aguas claras. – El monofilamento es una opción muy polivalente, económica y muy adecuada para cuando busquemos aportar un extra de elasticidad al conjunto.
A la hora de elegir la línea, también debemos de tener muy en cuenta la caña que vamos a utilizar, con el objetivo de lograr que el equipo, en conjunto, quede equilibrado y cumpla la función que se espera de él. En términos generales ninguna es mejor que las otras, lo interesante es, que como cada una de ellas tiene diferentes cualidades, eso nos da la oportunidad de elegir la opción que mejor cubra, al menos gran parte de los requisitos que estamos buscando.
La dorada es uno de los peces más increíbles que existen por la peculiaridad de su comportamiento, por su sabor en la mesa y también por la forma de su sutil picada. Esto hace que el pescador tenga que estar siempre muy atento del puntal de su caña para percibir que el pez está tirando del anzuelo.
Pero, ¿cuál es el cebo perfecto para coger una gran dorada? Ya sabemos que la dorada alimenta de gusanos, peces, crustáceos, moluscos, y en ocasiones come algas, aunque lo que más le gustan son los crustáceos como camarones o cangrejos. Su boca y sus mandíbulas son fortísimas, capaz de triturar almejas si es un ejemplar de mediano tamaño…
El conocido canal de pesca Pesca Mar TV en YouTube ha elegido los que cree que son los siete mejores cebos para sacar doradas gigantes. Hacemos un repaso a todos ellos.
¿Cuáles son los mejores cebos para pescar doradas gigantes?
1-. Cangrejo verde sin huevas ni patas traseras. Con un tamaño aproximado de una moneda de dos euros, en el que se incluyen uno o dos anzuelos. 2. Gusano americano o de sangre. Un clásico también para la pesca en agua dulce. 3. La calavereta, un cangrejo que vive normalmente enterrado en la arena y que puede conseguirse manualmente o comprarse en tiendas especializadas. 4. Pepino de mar, otro conocido y clásico cebo para pescar la dorada. 5. La navaja con cáscara, para hacer más realista el engaño y colocarlas en varios anzuelos en tándem. 6. El mejillón, un gran aliado de la pesca al surfcasting para cualquier tipo de pez. 7. Caracolas marinas sin cáscara, ya que aunque una dorada puede destruirlas, es mejor ponerle directamente el interior de éstas.
Pesca a surfcasting una descomunal dorada de 6,39 kilos tras una batalla épica en Cádiz
Josemari Alvarado con la enorme dorada que pescó a surfcasting.
Hay capturas que no se olvidan en la vida. La que te mostramos hoy es una de ellas. Se trata de una dorada gigante, de 6,390 kg, que el joven Josemari Alvarado tuvo la suerte de pescar hace unos días mientras practicaba su modalidad favorita: el surfcasting.
El lance tuvo lugar en la playa de Bolonia, en Cádiz y quedó grabado íntegramente en un vídeo que te mostramos en este enlace.
La primavera es la época de desove de los ciprínidos, esto significa que buscarán un gran aporte de alimento para compensar el gasto energético; y hay que aprovechar el momento. Aquí te contamos tres consejos para que triunfes.
Búscalos en las orillas someras
Al comienzo de la primavera el agua sube de temperatura y se produce un aumento del caudal de los ríos. Esto hace que los peces comiencen a despertar del letargo invernal y busquen alimento con ansia. Aún se encuentran débiles y no se van a desplazar largas distancias, se centrarán en zonas someras, donde el alimento sea fácil de localizar y donde las posibles corrientes no desgasten sus energías. Debes buscar las orillas donde haya árboles que les proporcionen cobijo y en lugares donde haya remansos.
Usa cebos muy nutritivos
Los boilies y los pellets tienen un gran poder de atracción y además suponen un gran aporte nutritivo para los ciprínidos, justo lo que buscan en esta época las carpas y barbos. Los que contienen buenas harinas de pescado y base de cangrejo, calamar, pulpo y krill son valores seguros. Además puedes probar con un toque de picante.
Ceba en abundancia
Una vez que haya concluido la freza, los peces vuelven a recuperar el apetito perdido durante la actividad reproductiva. Este momento coincide con el aumento de las horas de luz y de la subida de temperatura del agua. Haz un cebadero compuesto por semillas, boilies y pellets, pero no lo mezcles todo. Es mejor ir poco a poco para que se vayan acostumbrando y confiando. Deja un par de días o tres entre cada sesión de cebado.
Otros cuatro trucos para localizar y pescar grandes carpas en el río
España es tierra de carpas. En casi todos los ríos de nuestro territorio nacional la Cyprinus carpio está presente y podemos encontrar grandes peces de esta especie que hacen las delicias de cualquier aficionado al carpfishing. Pero ¿cómo dar con ellas? la cuestión es saber buscarlas, localizarlas y darles el alimento adecuado. En este artículo te explicamos cuatro trucos para que logres tener tu carpa récord en tus manos.
Las redes sociales han revolucionado el mundo en las últimas décadas. Su presencia ha cambiado la vida de las personas y, por ende, de los cazadores y pescadores. Tal calado tienen algunas nuevas aplicaciones que éstas permiten incluso vender un pescado… ¡mientras lo estás sacando con la caña!
En este caso, se consigue gracias a Taobao Live, una app impulsada por Alibaba en la que los consumidores pasan más de 350.000 horas diarias viendo diferentes programas en los que presentan productos en vivo, entre ellos peces recién pescados. Aunque en el caso de España no es posible por la imposibilidad de vender el pescado que obtienes de forma deportiva, esta app sí que tiene calado en otros países del mundo como China.
La web especializada Computer Hoy ha seguido el rastro en las últimas semanas de Xie Qingli, una madre de familia que todos los días sale a pescar con su marido y su suegro en el lago DongPing, en la provincia de Shandong, en China. Mientras ellos pescan con caña y red, ella retransmite todo el proceso en directo con su smartphone a los compradores de su tienda online en la plataforma TaoBao.
Durante la pesca, Xie va contando a los asistentes si hace frío o calor, si las capturas son buenas, y cómo está yendo la jornada. Los espectadores le hacen preguntas sobre cierta captura, mientras la enseña a la cámara. Si les gusta, pueden comprarla directamente a través de la app.
Mientras sacan las capturas de la red los compradores pueden verlas de cerca y pactar la compra con Xie Qingli. Cuando el barco llega a puerto, a media mañana, Xie introduce el pescado en cajas refrigeradas y las envía. Los compradores, que suelen ser particulares o restaurantes de la zona, lo reciben a mediodía o por la tarde, listo para la comida o la cena. Del agua a la mesa en apenas unas horas.
El siguiente vídeo muestra la emocionante lucha de una espectacular dorada, uno de los peces más increíbles que existen por la peculiaridad de su comportamiento y por la forma de su picada.
En ella, el youtuber Surfcasting Granada, uno de los especialistas en la pesca de este emblemático pez, acciona el freno del carrete cuando se inicia una dura lucha, ya que la caña se dobla por completo. Sin soltar hilo, la pelea queda entre el hombre y el pez, ganando la batalla en esta ocasión el primero.
Surfcasting Granada publicó a través de sus redes sociales el pasado mes de junio el vídeo de la pesca de esta dorada, que tiene más de 100.000 reproducciones en sus redes sociales.
Un pez araña de un kilo de peso sorprende en medio de la jornada
Antes de que picase la dorada, al pescador le sorprende un enorme pez araña de casi un kilo de peso, un enorme volumen para el que acostumbran a tener estos peligrosos animales. Posteriormente, a las 11:00 horas de la mañana, en cuanto cambió el aire y el agua, el pescador dio por finalizada la jornada. A continuación compartimos el vídeo de ésta.
Pesca a surfcasting una descomunal dorada de 6,39 kilos tras una batalla épica en Cádiz
Josemari Alvarado con la enorme dorada que pescó a surfcasting.
Hay capturas que no se olvidan en la vida. La que te mostramos hoy es una de ellas. Se trata de una dorada gigante, de 6,390 kg, que el joven Josemari Alvarado tuvo la suerte de pescar hace unos días mientras practicaba su modalidad favorita: el surfcasting.
El lance tuvo lugar en la playa de Bolonia, en Cádiz y quedó grabado íntegramente en un vídeo que te mostramos en este enlace.
El pescador Marcos Tabares, natural de Sevilla, vivió la pasada semana en Maldivas junto a su novia unos de los días más impactantes de su vida, logrando una captura de récord: una barracuda de más de metro y medio de longitud y más de 20 kilos de peso, «el mayor animal que se ha pescado en el barco en el que íbamos», asegura el pescador.
Ha sido un viaje de pesca tanto desde costa como desde embarcación, según explica Tabares: «Nos hemos ido a una isla local, no a la isla turística, ya que íbamos buscando un destino en el que pescar los peces más característicos de la zona», tales como Red Snapper -pargos rojos-, GT,s o peces emperador, además de barracudas.
«Nosotros todos los años intentamos buscar, dentro de lo posible, un destino donde poder pescar fuera de nuestro país. En esta ocasión, nos cuadró Maldivas, donde vivimos sensaciones totalmente auténticas: su cultura, sus costumbres, su gastronomía… algo que nos encanta, meternos de lleno en su forma de vida», expone Tabares a este medio.
A partir de mitad de la semana, fueron buscando peces de arrecife y les sorprendió la barracuda gigante que protagoniza esta entrada: «Midió más de un metro y medio y pesó 20 kilos aproximadamente», explica Marcos.
La picada fue a un Popper de 200 gramos: «La barracuda atacó de forma lateral el señuelo, algo que nos sorprendió, y luego explotó con el Popper en la boca a más de un metro de altura. Fue una picada muy fuerte, en la que tiró hacia adentro, buscando siempre el arrecife, los corales… por eso intenté que la pelea no fuese demasiado larga, para evitar así que se perdiese», explica el pescador.
«Tardamos unos siete minutos aproximadamente en el combate, en el que se iba metiendo al fondo de cinco metros que había, y por fortuna la sacamos bien», describe el sevillano.
Una barbacoa para celebrar la captura
Tras capturar la enorme pieza, la cocinaron para degustarla junto a la tripulación y el staff del hotel en el que se alojaron: «La hicimos en la barbacoa con el personal de la isla. Fue un momento entrañable. Allí comen pescado, coco y verduras, por eso disfruté viendo que ellos han aprovechado la carne del animal», concluye el pescador.
Estas han sido otras capturas conseguidas por Marcos y su novia estos días en Maldivas:
Más sobre la barracuda
La barracuda es un pez con aletas radiales conocido por su gran tamaño, aspecto temible y comportamiento feroz. Se encuentra en los océanos tropicales y subtropicales de todo el mundo, desde la frontera oriental del Océano Atlántico hasta el Mar Rojo y el Mar Caribe. Las barracudas residen cerca de la parte superior del agua y cerca de los arrecifes de coral y pastos marinos.
Al igual que los tiburones, algunas especies de barracuda tienen fama de ser peligrosas para los nadadores. Las barracudas son carroñeras y pueden confundir a los buceadores con grandes depredadores, siguiéndolos con la esperanza de comer los restos de sus presas.
El pescador madrileño Álvaro Alcántara, de 18 años de edad y natural de Coslada, pescó el pasado verano una espectacular carpa koi (Cyprinus carpio koi) blanca y con sus características manchas anaranjadas que pesó 8 kilos. Ahora, ha narrado a Jara y Sedal la increíble experiencia de la que ya se ha convertido en su mejor sesión de carpfishing hasta la fecha.
«Todavía recuerdo cuando vi por primera vez asomar el lomo de este pez, estaba solo en el puesto y me puse a gritar Papá tengo una koi», comienza relatando a esta redacción. Ocurrió en un lago del sur de Francia al que acudió junto a su progenitor durante quince días para practicar el carpfishing.
«Durante estas dos semanas, pescamos en dos lagos distintos. En el segundo, estuvimos las primeras 24 horas sin ninguna picada, luego estuvimos sacando peces de mediano tamaño y, por fin, al cuarto día, llegó esta captura», relata el joven.
Cuando le picó, se encontraba «súper nervioso», pero «llegando a la orilla es cuando me empezó a dar guerra y yo no quería forzarla demasiado». «Después de varios intentos conseguimos meterla en la sacadera y fue una bajada de tensión impresionante, ahí es cuando me di cuenta que había conseguido sacar un pez espectacular, justo lo que venía buscando», explica Álvaro.
«La táctica para conseguir este pez fue colocar la caña con el barco cebador en la subida del cauce de la orilla de enfrente», señala sobre el truco con el que consiguió dar con ella. El cebo empleado fue un montaje equilibrado con un pequeño cebado compuesto por semillas, boilies y pellets. Tras sacarlo a la superficie, el pez fue devuelto al agua en perfectas condiciones con la boca curada con un antiséptico especial de carpfishing.
Alcántara confiesa que, tras esta captura, hay «mucho tiempo de preparación esperando tener esta oportunidad, pero fueron momentos de felicidad máxima cuando ves que todo el esfuerzo y trabajo se ve reflejado en la picada». En total, sacaron cuatro carpas koi más, pero esta era la más rara y destacable por ser blanca con tonos anaranjados.
Otra experiencia inolvidable en un lago con carpas de hasta 38 kilos
Si eres un aficionado al carpfishing el vídeo que te mostramos a continuación te va a ser útil. Está protagonizado por David Martín y por su amigo Josean P., que hace unos meses disfrutaron de una jornada de pesca en el prestigioso lago francés de Domain de la Riviére, que alberga ejemplares de carpa de hasta 38 kilos de peso.Este es el vídeo.