Hola compañeros de pesca.
Quería compartir con todos vosotros las 4 jornadas de pesca (contando la primera que fue de cebado previo) que he tenido, os hago un breve resumen de lo acontecido.
Al final llegó mi primera jornada de primavera, con unos resultados bastante buenos y óptimos, teniendo en cuenta la corriente y caudal que aún traía el río, algo que dificulta tanto el cebado como la acción de pesca.
He acudido a dos lugares distintos:
Día 1:
Ese día fui por la mañana a preparar un cebadero a un lugar donde las carpas el boilie seguramente no lo hayan probado con cierta frecuencia, el cebado se componía básicamente de semillas: maíz, cañamón, trigo, chufa…, lo mezclé con engodo específico de carpa y algo de micro pellets de plátano, scopex, fresa y halibut, también metí boilies caseros hechos por mi y comerciales variados, previamente partidos y enteros.
Este cebado lo pude concentrar a una distancia aproximada de unos 100 metros, éste se realizó sobre un área aproximada de 5 a 6 metros cuadrados, a una profundidad de 3 metros y sobre un fondo blando y arenoso.
Día 2:
Ese día elegí hacer una sesión completa desde las 7:30 de la mañana hasta las 8 de la tarde.
Sinceramente no esperaba aún actividad alguna, debido sobre todo al desplome de las temperaturas de los días anteriores y sobre todo a que el cebado aún no habría hecho su efecto.
Así fue, un bolo en toda regla, pero ya aproveché para seguir precebando la zona con más semillas, micro pellets, boilies, engodo… esto era un inicio de que lo vendría días después.
Día 3:
Ese día volví a elegir la zona preparada, esperaba que las carpas ya estuvieran deambulando y acostumbradas a todo el cebo que les introduje.
Fue una sesión muy corta pero no por ello intensa y emocionante, apenas 4 horas en acción de pesca, pero donde pude sacar una magnífica carpa con boilie de scopex, la verdad que fue una sorpresa, ya que allí la corriente era todavía alta y aún con plomos de 150 gr no era capaz de detenerlos durante todo el tiempo que me hubiera gustado.
Día 4:
Después de la sorpresa de la tarde anterior, ese día volví a acudir de nuevo al sitio donde había elegido días antes.
La jornada de nuevo fue de un día completo desde las 7:30 de la mañana hasta las 7:30 de la tarde aproximadamente.
La temperatura ya había comenzado a subir y el cebado esperaba que ya realizara su función, así fue, los resultados fueron mejor de lo esperado, un total de 8 picadas claras y 5 capturas, alguna más pudo acabar en la sacadera pero ya próximas a la orilla se me soltaron, he de decir que el lugar es algo complicado para traerlas hasta la orilla, ya que está rodeado de árboles y espadañas a ambos lados, por eso que la complicación era doble.
Las picadas se produjeron al maíz dulce junto con artificial, al boilie de banana y source de 20mm y al pop-up de banana de 16mm.
Espero que os resulte interesante este “pequeño” reportaje escrito, y deseando volver de nuevo a pie de río a seguir disfrutando de este maravilloso mundo de la pesca y de mis compañeros de fatiga.
Un saludo a todos y nos vemos por las orillas.
El artículo Crónicas de unas jornadas de pesca. aparece primero en Revista Jara y Sedal.